domingo, 5 de octubre de 2008

Un jugo de naranja.




La verdad? No la sabía… cómo podía saber lo que pasaba por su mente, cómo saberlo… era como si estuviera cansada de tener que dar explicaciones, a la vez no…daba cierta impresión de no saber estar en pareja, o por lo menos parecía hostigarle que se metieran en sus cosas, en sus amistades, en su cuarto… cada vez era ese el problema, nada la convencía, pero más allá de eso…supongo que era solo miedo a perder, miedo a equivocarse, miedo a estar con otra persona sólo porque esa persona la quería muchísimo, pero ella no estaba segura de corresponder de igual forma… ella decía que prefería esperar lo verdadero y lo mutuo, lo casi perfecto… que suponía que existía en algún lugar…

Como si no quisiera repetir una historia…


mientras tanto, abro la ventana de mi pieza y me asomo a ver el atardecer, lo bueno es el aroma que deja el sol en las flores, y pienso si debería o no dejar cierto orgullo, y pienso… si debería intentarlo…pero me parece que así todo es mejor aún…

1 comentario:

AM dijo...

Ohh nena, seguimos conectadas todavía...sabes?, el miedo es quizás uno de los más placenteros y a la vez terribles sentimientos que se pueden sentir, y más en relación al amor (amor, qué palabra más inexacta).
Descubrí que le tengo miedo a estar con otra persona, y quizás por eso siempre me cubro con una capa de hielo, y a veces soy tan cortante y fría, distante. Me da miedo profundizar las cosas. Me da miedo compartir "mis" miedos con otro ser, mis sentimientos. Y si resultamos dañadas?...vale la pena?, o mejor quedarse así, sin correr el riesgo?.
Pienso que es mucho más emocionante correrlo, claro!, es parte de ser lo que somos, y de sentir lo que sentimos. O si no, cómo todo lo que se queda allí, inmovible, sería fome.

Los jugos de naranja son los mejores!, y ya hay granizados xD
Freedoooooommmmm!.
=*